Mi Historia
El Liceo Polivalente de Ancud: nació en el año 2020 como resultado de la fusión de dos establecimientos: el Liceo Domingo Espiñeira Riesco y el Liceo Agrícola de Ancud. Para comprender su historia, retrocederemos a los inicios de cada uno de estos colegios.
Liceo Domingo Espiñeira Riesco: En 1869, el Presidente de la República, Don José Joaquín Pérez Mascayano, continuando la política de su predecesor de crear instituciones educativas en las principales ciudades del país, ordenó la creación del Liceo de Hombres de Ancud mediante el decreto No. 24 del 4 de enero de ese mismo año.
En sus inicios, se le conocía como Liceo de Segunda Clase Provincial y durante muchos años fue el único establecimiento público de enseñanza secundaria desde Valdivia hasta Punta Arenas. Comenzó a funcionar el 10 de marzo de 1869 con una matrícula de 57 estudiantes distribuidos en dos cursos: uno de preparatoria y otro de humanidades. El personal docente estaba compuesto por el Rector Don Liborio Manterola, quien impartía clases de Latín, Gramática Castellana y Aritmética; Don Desiderio Galecio, a cargo de Historia Antigua Griega y Geografía; el profesor de Preparatoria, Don Zoilo Cofré; y, por último, el Inspector Don Pedro Bustamante.
En 1890, se estableció el segundo curso de humanidades y se nombraron tres profesores adicionales. Por lo general, las clases comenzaban a las 7 a. m. y se extendían hasta las 5 p. m. En ese año, ya asistían 71 alumnos.
En 1906, Don Darío Cavada Contreras asumió como Rector y enfatizó la necesidad de que el Liceo contara con un edificio más amplio y cómodo que el que ocupaba en la calle Dieciocho.
En 1922, Don Álvaro Rivera asumió la dirección del colegio y logró que el Liceo de Ancud se destacara por su enseñanza metódica y disciplinada. En 1923, se estableció el sexto año de humanidades y una sección de internos con 30 pupilos; en 1924, la sección de pupilos alcanzó los 49 y, en 1925, los 88.
En 1927, se integró aulas para la primera generación de niñas, convirtiéndose en un Liceo Coeducacional, aunque conservó su nombre original durante muchas décadas.
El 14 de mayo de 1980, mediante el decreto 3791, se le otorgó el nombre de Liceo B-31 Domingo Espiñeira Riesco, en honor al Intendente de Chiloé, quien desempeñó un papel decisivo en la organización de la expedición náutica de la Goleta Ancud, que el 21 de septiembre de 1843 tomó posesión del Estrecho de Magallanes en nombre del Estado de Chile.
A lo largo de su historia, el Liceo ha ocupado varios edificios en la ciudad. Actualmente, se encuentra en el edificio que anteriormente albergó la emblemática Escuela Normal de Ancud y, más tarde, la Universidad Austral con la Escuela de Pedagogía Básica.
Liceo Agrícola Ancud: La historia del Liceo Agrícola se remonta al año 1988, cuando un equipo de docentes y profesionales de apoyo externo elaboró el Proyecto Educativo Liceo Politécnico B-43. Este proyecto fue solicitado por la Corporación Municipal de Educación con el objetivo de crear una alternativa de enseñanza técnico-profesional para la juventud estudiantil de Ancud y las comunas cercanas. Estudiantes que, debido a razones vocacionales y económicas, enfrentaban dificultades para acceder a la educación superior y necesitaban obtener un título habilitante en alguna especialidad. Inicialmente, este proyecto consideró tres especialidades: Técnico en Turismo, Técnico en Construcción de Embarcaciones Menores y Técnico Silvoagropecuario.
El proyecto comenzó en 1991 con una sola especialidad: Técnico Silvoagropecuario y una matrícula inicial de cuarenta y dos estudiantes. Funcionaba como modalidad técnico-profesional del Liceo Domingo Espiñeira Riesco, ubicado en el edificio de la actual Municipalidad de Ancud. En 1992, se trasladó junto al área científico-humanista a las dependencias de la ex Escuela Normal, ubicada en Almirante Latorre 555.
En 1995, la modalidad técnico-profesional se trasladó a dependencias contiguas del Liceo Domingo Espiñeira Riesco, ocupando la infraestructura del antiguo internado de varones. En 1996, comenzó a funcionar de manera independiente como Liceo Agrícola. La especialidad se inició con un equipo de docentes, salas de clases y algunas herramientas básicas. Sin embargo, no había un campo donde los estudiantes y docentes pudieran realizar prácticas efectivas. Por lo tanto, en 1995, la Corporación Municipal de Educación adquirió el Fundo Santa Adriana, una extensión de 93,6 hectáreas ubicada a 25 km al noreste de Ancud, en el sector de Puerto Elvira.
Tras la fusión, el Liceo Agrícola de Ancud imparte las especialidades técnicas de Agropecuaria con mención en Pecuaria, Contabilidad y Atención de Párvulos. Esto responde a la creciente necesidad de brindar más oportunidades de formación técnica vinculada al mundo laboral. Estas decisiones se basan en las orientaciones, articulaciones y recomendaciones surgidas de los planes de desarrollo educativo (PADEM), el Plan de Desarrollo Comunal (PLADECO), el Proyecto de Educación Superior de la Universidad de Los Lagos y otros factores relevantes para la comunidad.
En el primer lustro del siglo XXI, ambos establecimientos ingresaron a la JECD, complementando su Proyecto Educativo Institucional. Entre sus grandes desafíos se encontraba mantener el histórico prestigio educacional del Liceo Domingo Espiñeira Riesco y ofrecer nuevas oportunidades de desarrollo educativo al Liceo Agrícola.
En la actualidad, el Liceo Polivalente de Ancud imparte, además de la modalidad científico-humanista, las especialidades de Agropecuaria con mención en Pecuaria y Atención de Párvulos.